Así como hay animales que tienen un documento con su ascendencia genética, también existen estereotipos de belleza. ¿Cuál es el objetivo de todo esto? Lo charlamos con el médico veterinario Juan Ramón Duránd, asesor de cabañas.
Por Claudia Cagigas
Treinta y nueve años atrás, cuando se realizaba la primera Exposición de la Sociedad Rural de Chajarí, era una época muy buena para el campo y, por tanto, era importante contar con un lugar donde el ganadero pudiera comprar animales de alto valor genético para mejorar sus rodeos. “Esa fue la finalidad de las fiestas rurales. Empezaron a aparecer las primeras razas que se explotan en el país como la Hereford y la Aberdeen Angus -antiguamente era la Shorton-… En la actualidad, los animales que se vienen a vender en la Exposición provienen de diferentes cabañas. Son animales mejoradores porque sirven para que el productor que hace el rodeo comercial, pueda comprar genética para mejorar lo que él tiene en el campo “, explicó el médico veterinario Juan Ramón Duránd en EL ESPEJO (Canal 2 de ItelTv).
Los animales mejoradores reúnen ciertos requisitos fenotípicos -que se pueden ver a simple vista-, pero también ayudan a obtener mayor rentabilidad por la ganancia genética. “Esto quiere decir que si mi producción me da terneros de 180 kilos al deteste, pero quiero ganar 20 kilos más, tengo que buscar animales mejoradores que me permitan llegar a 200. Son kilos que le agrego a mi producción y que mejora mi rentabilidad”.
Ahora bien, ¿cuáles son los requisitos fenotípicos, las características deseadas en un macho o en una hembra y qué sentido tiene todo eso?
“Hay una selección fenotípica que se basa en lo que veo. Cuando selecciono una hembra, tengo que buscar que sea femenina, es decir, que tenga una cabeza liviana, chiquita, un cuello fino, un cuerpo con forma triangular con el vértice hacia la cabeza. También miro la línea inferior, el desarrollo mamario, porque es el que va a alimentar al futuro ternero. Entonces, cuando voy a comprar una madre la miro de frente, de costado y de atrás porque también tengo que ver los aplomos: como pisa, si están bien dirigidas las patas, las manos, si no tienen defectos hacia adentro o hacia afuera. Todo eso se evalúa para decir esta sí o esta no. Y luego, en la parte de producción, analizo si produce un buen o un mal ternero, si el ternero engorda o no…”, explicó Juan Duránd.
Rasgos de masculinidad en los toros
Hormonalmente vacas y toros son diferentes, por tanto, poseen características diferentes. El macho “debe tener un cogote ancho, musculoso y pesado al igual que toda su estructura. La circunferencia testicular es muy importante porque los testículos son la fábrica de espermatozoides. El mínimo permitido por las Asociaciones de Criadores para que un animal sea considerado apto para servicio es de 34 centímetros a los 24 meses de edad, pero los ganadores de la Exposición de Chajarí de este año tienen entre 40 y 41,5 centímetros. Hay toros con estas condiciones y con una capacidad de monta importante, que pueden llegar a preñar más de 70 vacas en 40 días, lo cual es muchísimo porque cuando no se hacen estos controles se suele utilizar cuatro o cinco toros cada 100 vacas”, concluyó el médico veterinario.