Por Marisa Domínguez

La sociedad en su conjunto enfrenta un claro avance con el flagelo de las adicciones, cada vez más personas son víctimas de esta problemática y en los últimos años franja etaria se ha ido ensanchando. El consumo de los diversos estupefacientes no es la única adicción que avanza a pasos agigantados, también el aumento excesivo en el consumo de alcohol preocupa y causa exposiciones a peligros contantes, para todos. En este marco, en la ciudad de Chajarí funciona el Centro Municipal de Prevención de Adicciones, sin embargo el mismo “no está habilitado para tratamientos”, aclaró el intendente de la ciudad, Pedro Galimberti en el programa radial El Espejo (Radio Show Chajarí)

“Como todo el mundo sabe, para realizar tratamientos en estas problemáticas tan sensibles se necesita disponer de habilitaciones y el centro con el que contamos no está habilitado como tal. Entonces lo que hacemos es un trabajo enfocado en la prevención ya que las adicciones son un flagelo que avanza y uno debe detener”, precisó el intendente.

Este flagelo “no es solo es el mal de esta ciudad o de una ciudad, por eso desde el punto de vista de la prevención lo que sí hacemos son terapias de acompañamiento para quienes padecen la adicción. Y para ello asisten al centro, en la actualidad, alrededor de veinte chicos”, agregó el presidente comunal.

Por otra parte, Galimberti también enfatizó sobre el trabajo que se está realizando en conjunto con las diversas iglesias “desde donde se ha tenido muy buena aceptación ya que sin importar los credos, sirven para contener, acompañar y dar una ayuda a quienes lo necesitan y también para que comencemos a hablar del tema, porque cuando nos callamos es cuando permitimos el avance”.

Al mismo tiempo, “el municipio acompaña constantemente el combate de este flagelo con lo que entiende son las alternativas para lograr llevar a los chicos por el buen camino, dándole el acceso a los deportes, a las actividades de recreación y cultural”, señaló el entrevistado.

Por último, el intendente de Chajarí concluyó diciendo que “más allá de todo el aporte que como municipio podamos hacer, está claro que se necesita un compromiso social para avanzar y combatir esto. Por eso desde el municipio entendemos que el principio está en reconocer que existe el problema y empezar a hablar sobre ello a través de charlas y talleres que ya se comenzaron a realizar en diversos barrios. Pero es una problemática compleja que necesita que la sociedad se involucre para cambiar y combatirla”.