Por Claudia Cagigas
Mientras Juan Cruz Frontán (22) lucha por salvar su ojo derecho y espera que le puedan reconstruir el izquierdo algún día, se sigue un proceso judicial para determinar quién asestó el golpe con el vaso de vidrio que le destrozó los ojos. Hay un imputado: Felipe Esponda (19). Su abogado, Gustavo Rader, el sábado pasado pidió el derecho a réplica en el programa radial EL ESPEJO. Anteriormente habíamos hablado con Gabriela Vázquez, mamá de Juan Cruz y con su tía, Nancy Frontán.
La condena social es uno de los aspectos que más le preocupan a Rader, quien pidió prudencia a la hora del tratamiento del tema, tanto en los medios de comunicación como en las redes sociales.
La inocencia de Esponda es otro aspecto que sostuvo y, en ese sentido, aseguró que su defendido jamás reconoció ser el autor del hecho. “No hay un reconocimiento del hecho, porque no se va a reconocer algo que no se hizo”, aseguró.
Tras manifestar que comparte el dolor que siente la familia de Juan Cruz, como también lo comparte la familia Esponda y desean su pronta recuperación, Rader recordó que “el hecho se está investigando”. “Está en la etapa procesal; el fiscal está recolectando las pruebas y tratará de vislumbrar cómo se sucedieron los hechos y que fue lo que pasó”.
La noche en que hirieron a Juan Cruz dentro del boliche Gigante, según contó su mamá (a partir de lo que relataron testigos), había dos ruedas de chicos y chicas bailando. En un momento Juan Cruz se dio vueltas para pedirle a otro que pare de empujar y ahí recibió el golpe que le destrozó los ojos. Así las cosas, no sería de extrañar que haya testigos directos que puedan arrojar datos fehacientes sobre lo que sucedió.
Para el abogado, “en las causas penales nunca es fácil. La tarea del fiscal es ardua, complicada, tenés muchos testigos, muchas declaraciones, tenés que ver a qué testigos le crees y a qué testigos no… Estamos en una etapa de investigación, (Felipe Esponda) no está declarado culpable…”, recordó.
¿Es cierto que Esponda tenía cortes en la mano?
“No me consta que así sea… Obviamente que confío en la Justicia, fiscales, jueces y camaristas de Chajarí que jamás se van a dejar influenciar por comentarios sociales o redes sociales”, respondió Rader.
¿Es cierto que hubo un intento de trato por parte de la familia Esponda para ayudar económicamente a Juan Cruz Frontán?
“La familia Esponda está preocupada por el chico pero no con un sentimiento de culpa, está preocupada como cualquier padre porque el hijo también estuvo ahí en el boliche, pero no tienen sentimiento de culpa. Yo mismo les digo que no tienen que tener contacto con la familia sino dejarnos trabajar entre abogados, porque acá es donde se dan las malas interpretaciones”, explicó Rader. “Hubo, si se quiere, una suerte de solidaridad, pero no un (pedido de) acuerdo para que levanten los cargos”, aseguró.
¿Qué dice Felipe de esa noche?
“Bueno, eso es una cuestión que vamos a ir viendo a lo largo de la investigación y que voy a ir hablando con mi defendido. Lo que pasó, te reconozco, es un hecho lamentable, no se lo deseo a nadie y me solidarizo con la familia Frontán y esperamos la pronta recuperación del chico… ahora no por eso vamos a agarrar a uno para culparlo”, respondió.
¿Desde su punto de vista, como abogado, qué fue lo que pasó?
“Mirá, ni yo se bien qué es lo que pasó todavía porque estamos investigando. Calculamos que en un tiempo no muy lejano se va a vislumbrar bien qué fue lo que pasó y cómo se sucedieron los hechos”.
¿Uste tiene la certeza de que su defendido no fue, a pesar de que no se sabe lo que pasó? Sí. Según lo que él me manifiesta y demás sí.
Hasta aquí las aclaraciones del abogado defensor del único imputado en el caso. Personalmente me quedo con el deseo de que quienes deben administrar Justicia puedan determinar lo que efectivamente pasó esa noche, primero por Juan Cruz, pero también por todos los jóvenes que salen a divertirse y que deberían volver sanos y salvos a casa. Por otra parte, quiero subrayar que la problemática social que tenemos con la droga, el alcohol, los jóvenes (y no tan jóvenes) es tremenda; claro está que no se soluciona con una condena sino con hacernos cargos cada uno de los que nos toca: padres, organizadores de la noche de Chajarí y quienes deben hacer que las ordenanzas vigentes se cumplan.
Notas relacionadas
https://www.elespejorevista.com.ar/?p=898