“Los fenómenos naturales no se pueden evitar; no se puede evitar la llegada de la Niña, pero sí tomar recaudos para que sus consecuencias no sean tan nefastas. En Argentina tenemos gente que sabe mucho de esto y hay que convocarlos”, dijo la docente y bioquímica en el programa EL ESPEJO (Radio Show Chajarí), al tiempo que exigió políticas públicas medioambientales.
Por Claudia Cagigas
Al igual que el fenómeno de El Niño, el fenómeno de La Niña se hace presente en gran parte del planeta en ciertos meses del año, dejando grandes desastres en la naturaleza y en la vida del ser humano. ¿Es posible evitar los fenómenos naturales? No. ¿Es posible anticiparse y prevenir sus consecuencias? En parte sí, si se toman las medidas necesarias. De ahí la importancia de actuar con antelación, tomando decisiones que puedan ayudar a mitigar su impacto y evitar desastres como los provocados por el fuego en Corrientes.
En el programa EL ESPEJO (Radio Show Chajarí), dialogamos con la bioquímica y docente María Inés Ciciliani, quien se refirió a la Niña (que trae sequía), el Niño (que trae mucha agua) y el Neutro (el equilibrio). “Estos fenómenos naturales se producen porque el Océano Pacífico cambia de temperatura y al hacerlo interfiere en la atmósfera; la atmósfera se altera y provoca estos fenómenos”, explicó.
El Niño trae mucha agua y provoca inundaciones. La Niña trae sequía, falta de lluvias, mucho viento y aumento de temperatura y “se instala cada dos o siete años en un determinado lugar, sobre todo en la parte sur de Latinoamérica”. Se espera que “luego venga lo Neutro, donde vuelve el equilibrio porque la Naturaleza siempre te lleva a los extremos y después te trae al equilibrio”, dijo.
En cuanto a la catástrofe producida en Corrientes con la aniquilación de la vida animal y vegetal que existía en miles de hectáreas devoradas por el fuego, Ciciliani cuestionó la falta de prevención. “Si expertos en clima nos estaban avisando varios meses antes del fenómeno de la Niña, lo mínimo que se podría haber hecho era revisar las condiciones de prevención del fuego para ciertos sectores que podrían estar en peligro… Se podría haber pensado que, en Corrientes, en la parte del gran humedal, hay demasiada humedad para que se provoque fuego, pero no nos olvidemos que últimamente Corrientes es muy forestal. Entonces el riesgo es alto, al igual que en Misiones que también tiene mucha forestación”.
En el mismo sentido, aclaró: “Hablo de políticas públicas, no partidarias. Las políticas públicas tienen que llevarse a cabo y tienen que ser preventivas… Me parece que allí estuvo el olvido, no sólo a nivel provincial sino nacional. Más allá de que todos los recursos de la provincia, por Constitución, son provinciales, me parece que, si existe un Ministerio Nacional de Medio Ambiente, tendría que haber tomado cartas en el asunto”.
¿Si los fenómenos naturales no se pueden evitar, cómo se puede prevenir?
“Los fenómenos naturales no se pueden evitar; no se puede evitar la llegada de la Niña, pero sí tomar recaudos para que sus consecuencias no sean tan nefastas. En Argentina tenemos gente que sabe mucho de esto y hay que convocarlos”, dijo Ciciliani.
La ecología del fuego es una disciplina científica relativamente nueva, que estudia los efectos y funciones del fuego en un ecosistema. El manejo del fuego está dentro de sus parámetros. Entonces, si sabemos que la Niña trae sequía, falta de agua, vientos y altas temperaturas, inexorablemente hay que pensar en que el fuego aparecerá y será necesario disminuir al máximo los factores de riesgo.
¿De qué manera? Aclarando que no se especializa en el tema, Ciciliani ejemplificó que, a modo de prevención, en algunas forestaciones se hacen fuegos controlados para limpiar el colchón de hojas que se forma al caer éstas. “En momentos de sequía estas hojas se vuelven altamente combustibles, entonces previamente se hacen incendios controlados para limpiar el suelo”, dijo. “Este tipo de medidas no se deberían tomar en un momento de sequía tan importante, pero sí se podría haber aplicado a partir de la información que varios meses antes había difundido la comunidad científica sobre la aparición de la Niña en Sudamérica”. Finalmente, volvió a recalcar el rol de política pública en la prevención y educación ambiental porque “educación ambiental no se le da solamente a los nenes, se debe brindar a toda la ciudadanía”, concluyó